viernes, 13 de mayo de 2011

Imperfecto


La brisa, el tiempo, las experiencias, el sumar de momentos, de sensaciones, de personas, personas que se olvidan, personas que se recuerdan, segundos, minutos, horas. Lucidez. Realidad. Consecuencias.

Todas palabras, palabras dispersadas sobre mi cama, lágrimas dispersadas sobre palabras, instantes sobreseídos por recuerdos incandescentes, indisolubles, incapaces de irse, incapaces de avanzar. Momentos retenidos, momentos olvidados, descontrolados, corriendo más allá de la memoria, ahí están plasmados, en las veredas de la calle, en las esquinas con la muerte, entre el licor sobre las heridas, en la sumisa espera de una lección. instantes profundos? desolados? no. llenos de gente, atiborrados por multitudes, asfixiados por miradas, por voces, manos, personas. Personas diferentes que parecían ser iguales. Entonces cree una forma de pensar y de creer, Entonces vi como desaparecías, en aquellos segundos, minutos, horas, cuando en un surgir repentino, supremo, extasiante, excitante, imperfecto, se unieron nuestras vidas.


Porque en algún instante conocemos gente, nos topamos día a día con cientos de personas, algunas nunca notaremos que están ahí, otras, nos cambiaran la vida, seguirán en ella, y aunque algún día dejen de estarlo, seguirán vivos, seguirán presentes, en nuestra memoria, en nuestros actos, en nuestra forma de pensar, las personas que te cambian la vida, que te dejan algo, que te marcan, las que no se pueden olvidar, las que no se olvidarán jamás. No soy solo una persona, soy el conjunto de todo y de todos los que he conocido a lo largo de estos años. Años cargados de lucidez, realidad y consecuencia.