lunes, 6 de febrero de 2012

Incandescente


No va dependiendo de supuestos
se une entre los momentos perfectos
la vida brillando entrelazando los destinos
y ahí en la masacre perfecta se pudo oír el canto de los dioses.

Las luces que rodean el cielo,las nubes que dividen los infiernos, las miradas melodiosas de los hombres que robaron los sentimientos, ahí me encontraba una vez más bajo la sombra perpetua del silencio. Bajo el árbol que sobrevivió a los recuerdos, el clamor de volver a lo opuesto, el refugio se encontraba claro y concreto, ahí no existían los misterios.  Me refugié en tus ojos eternos, plasmados en la vía hacia cielo, mientras el artificio ilumina la ciudad, mientras con la calma intercambiamos de lugar... solo se oye un murmullo en la ciudad

Entre un tiempo en calma existen de pronto las tormentas, los segundos agobiantes, la vida imperfecta.... después del tiempo en ruinas regresas al origen del encuentro, después de lo siniestro se convoca a lo adverso... incandescente aire en busca de la quimérica oleada de sueños.




Regreso al hogar.

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