Algo que pretendió ser especial.

Y no sé porque el daño se acomoda tan fielmente a nuestra cotidianidad.
Y no entiendo en que momento mi mirada ya no encontraba a nadie verdadero dentro de ti.
En los instantes en que el obscuro episodio de mi vida me aterraba, los segundos me ahogaban con tu cuerpo a mi lado, nunca me entregaste tranquilidad.
Y no sé en que momento confundimos la necesidad con el amor, y me preguntaré mil veces por que aveces preferimos tanto la humillación, en realidad las paredes llevan escritas mis palabras formadas con mi mente, y por cada segundo en que me tragué mis lagrimas, ahora sonrío, ya no hay nada porque pedir perdón. es tan falsa tu vida como tus historias, y lo realmente verdadero lo dejamos escapar muchas veces, por miedo a ver la realidad.

No escribía hace mucho, y la verdad esto no tiene un significado más allá que desahogarme, porque aparte de quitar me un trozo de felicidad por un corto tiempo, creo que también en algún momento se me fue la inspiración, siempre pensé que desde la tristeza uno se enfocaba muchas veces hacia escribir, pero era tan grande el dolor que sentía, que hasta mis dedos se nublaban cuando pretendían formar una palabra. Te dije hace mucho tiempo adiós, solo que el escribirlo no era parte de esta historia.
Como no fue parte la confianza, y gran parte por lo menos para mi, no fue parte la felicidad. Es más fácil sufrir que querer ser feliz, pero porque confundimos muchas veces las cosas, y por un día de felicidad sacrificamos muchos más. Que rabia sentir ahora que ni siquiera ese día, fue verdad. Hasta siempre. Aunque dentro de mi corazón el cariño me ciegue muchas veces, Amor, Odio, Amor.