En el mundo de las adicciones, en la caída libre sobre lo que no debe tentar.
Libérame del alma, libérame de lo que me hace creer y pensar.
Cientos de movimientos en falso llevaron la enajenación al limite de la deserción,
y desafiando los caminos
olvidamos como decir que no.
La ira se deshizo entre las manos.
La ultima vez que hablamos parecía todo tan normal.
La ultima vez que hablamos parecía todo tan normal.
Arranca, tírame y vete lejos de aquí
lo sabroso tiene un sabor amargo después, cuando logras despertar
y el sonido infernal comenzó otra vez. Palabras caídas, conciertos en llamas.
Aún así
La última vez que hablamos parecía todo tan normal, tan normal.
Y eso se torna cada vez más inexplicable
nos encontrábamos de un momento a otro en un lugar distinto, desaparecer sin dejar rastros de donde se estará.
Esconderse sin ser visto, no ser encontrado es el objetivo final....
y para de decir que la ultima vez que hablamos parecía todo tan normal.
Nunca existió un sentido, no necesito una excusa para volver. No necesito dar una explicación. No necesito que esto parezca normal.
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